Simplifica y mejora el rendimiento en el campo
La agricultura y la viticultura de precisión han encontrado en los drones una herramienta revolucionaria para optimizar la producción, reducir costes y promover una gestión más sostenible de los cultivos. Estos vehículos aéreos no tripulados ofrecen una perspectiva única y datos detallados que transforman la manera de trabajar la tierra.
ASISTE A NUESTRAS JORNADAS GRATUITAS LOS DIAS 1, 2 Y 3 DE JULIO
Operaciones aéreas con DJI T10, DJI T50 y DJI Mavic 3 Multiespectral
DÍA 1 LA GUARDIA – Jornada Teórica normativa y permisos de 9:00h 11:00h y vuelos 12:00h a 14:00h
DÍA 2 ALCANADRE – Jornada práctica 9:00h a 12:00h
DÍA 3 BURGOS – Jornada práctica 9:00h a 12:00h
DIA 1 DE JULIO
Jornada de 9 a 11 en las instalaciones Villa Lucia Espacio gastronómico ( La Guardia- Álava) , explicación teórica, normativa y muestra de las aeronaves a emplear.
Exhibición en cultivo de 12:00h a 14:00
DÍA 2 DE JULIO
Exhibición aérea en Alcanadre con DJI T10, DJI T50 y DJI Mavic 3 Multiespectral.
Tratamiento y análisis de cultivo.
Inicio 9:00h finalización 12:00h
Salida desde Cooperativa de Alcanadre
DÍA 3 DE JULIO
Exhibición aérea en Burgos con DJI T10, DJI T50 y DJI Mavic 3 Multiespectral.
Tratamiento y análisis de cultivo.
Inicio 9:00h finalización 12:00h
No puedes faltar
Comprueba en directo el rendimiento de los drones en el cultivo
Aumento de la Producción (Más Kilos): Al detectar problemas de plagas, estrés hídrico o falta de nutrientes de forma temprana, los drones permiten una intervención inmediata que evita pérdidas. Además, al no compactar el suelo ni dañar las plantas como la maquinaria terrestre, se asegura que cada planta alcance su máximo potencial productivo.
Mejora de la Calidad (Mejor Producto): La aplicación precisa y homogénea de tratamientos y fertilizantes asegura un crecimiento uniforme del cultivo. Esto se traduce en frutos de mayor calibre, con mejores propiedades (p.ej., más grados en la uva) y una calidad general superior, lo que a menudo significa un mejor precio en el mercado.
Optimización de Recursos (Mayor Rentabilidad): El rendimiento también se mide en la eficiencia. Al utilizar hasta un 40% menos de fitosanitarios y un 90% menos de agua, los drones reducen drásticamente los costes de producción. Producir más y de mejor calidad, gastando menos, dispara la rentabilidad por hectárea.
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Días 1, 2 y 3 de Julio de 2025
¿Por qué usar drones?
Los drones pueden operar sin problemas en terrenos complicados, como laderas escarpadas, zonas encharcadas, cultivos con alta densidad o arquitecturas de viñedo complejas. Esto elimina la compactación del suelo causada por la maquinaria pesada y permite tratar áreas que antes eran inaccesibles o muy difíciles de trabajar.
Además la fumigación con drones elimina la exposición directa y el riesgo de intoxicación de los agricultores a productos químicos peligrosos. Al ser una aplicación tan dirigida, se reduce drásticamente la deriva (el producto que se dispersa fuera del objetivo), minimizando la contaminación de suelos, fuentes de agua y cultivos colindantes, ahorros en personal, tiempos, combustibles, etc…
Los drones diseñados para esta tarea sustituyen el sistema de tanques y boquillas de pulverización por un depósito o tolva específica para sólidos y un mecanismo de dispersión centrífugo. El funcionamiento es el siguiente:
- Carga del Sólido: La tolva del dron se llena con el producto granulado o en partículas que se desea aplicar.
- Planificación del Vuelo: Al igual que en la fumigación, se programa una ruta de vuelo precisa sobre el área de tratamiento mediante GPS y software de mapeo.
- Dispersión Controlada: Durante el vuelo, el dron abre una compuerta en la parte inferior de la tolva, dejando caer el sólido sobre un disco giratorio (plato esparcidor). La velocidad de rotación del disco y la apertura de la compuerta se ajustan electrónicamente para controlar la dosis y la anchura de la franja de aplicación con gran exactitud.
Absolutamente. Esa es la pregunta clave y la respuesta corta es: sí, en la gran mayoría de los escenarios agrícolas modernos, tratar con drones es rentable y merece la pena.
La cuestión ya no es tanto si son útiles, sino cómo y dónde se aprovecha mejor su potencial. Aquí te desgloso por qué son rentables y cuándo merece especialmente la pena.
Factores de Rentabilidad Directa (¿Dónde se Ahorra y se Gana Dinero?)
Ahorro Masivo de Insumos: Es el factor más inmediato. Al aplicar producto (fitosanitarios, fertilizantes) o agua de forma ultra localizada, el ahorro es enorme. Se habla de reducciones de hasta un 40% en productos químicos y hasta un 90% en agua. Gastas menos en comprar producto.
Mejora del Rendimiento y Calidad de la Cosecha:
Menos Daño al Cultivo: Un tractor, al pasar, siempre causa algo de daño por pisado (compactación del suelo y rotura de plantas). El dron no toca el cultivo, lo que se traduce en más kilos cosechados por hectárea.
Aplicación en el Momento Óptimo: Puedes tratar el campo justo cuando lo necesita, incluso si ha llovido y está embarrado. No tienes que esperar a que el terreno se seque. Actuar en el momento preciso maximiza la eficacia del tratamiento y la salud de la planta, mejorando la calidad final del producto.
Reducción de Costes de Combustible y Maquinaria: Un dron funciona con baterías eléctricas. Su coste operativo es ínfimo comparado con el diésel que consume un tractor o una avioneta. Además, se reduce el desgaste y mantenimiento de maquinaria pesada.
Optimización de la Mano de Obra: Las operaciones son mucho más rápidas y pueden ser realizadas por un solo operario cualificado, liberando a otros trabajadores para otras tareas.
El Valor Añadido: Más Allá del Dinero (¿Por qué “Merece la Pena”?)
Aquí es donde los drones realmente brillan, ofreciendo ventajas que son difíciles de cuantificar en euros en el corto plazo, pero que son cruciales.
Sostenibilidad y Medio Ambiente: Usar menos químicos y agua no solo ahorra dinero, sino que protege el medio ambiente. Reduce la contaminación de acuíferos y la huella de carbono de la explotación. Esto, cada vez más, tiene un valor de mercado (certificaciones ecológicas, imagen de marca, etc.).
Seguridad Laboral: Es un punto fundamental. El operario no se expone directamente a la deriva de productos químicos peligrosos. Pilota el dron desde una zona segura. Esto reduce los riesgos de intoxicación y enfermedades a largo plazo.
Acceso a Zonas Imposibles: Permiten trabajar en viñedos en pendiente, terrenos escarpados o fincas de difícil acceso donde la maquinaria tradicional simplemente no puede operar. Esto puede hacer que una explotación que antes era inviable, ahora sea productiva.
Rapidez y Flexibilidad: Ante una plaga que avanza rápidamente, la capacidad de tratar toda la superficie afectada en cuestión de horas (en lugar de días) puede salvar una cosecha. Esta agilidad operativa no tiene precio.
Por lo tanto…
Sí, son rentables y merece la pena. La agricultura de precisión con drones ha pasado de ser una novedad a ser una herramienta de trabajo consolidada. Para la agricultura del siglo XXI, especialmente en cultivos como viñedos, olivar, frutales, y en cualquier explotación que busque optimizar recursos y ser más sostenible, la inversión o contratación de servicios con drones se recupera rápidamente a través del ahorro en insumos y la mejora de la cosecha.
Es un salto tecnológico comparable al que supuso en su día el paso del arado animal al tractor.
En el campo, los drones equipados con cámaras multiespectrales y sensores térmicos permiten a los agricultores obtener una radiografía completa de sus explotaciones. Es posible identificar con una precisión milimétrica zonas con estrés hídrico, deficiencias de nutrientes o la aparición temprana de plagas y enfermedades. Esta información, obtenida en tiempo real, facilita la toma de decisiones para aplicar de forma localizada y eficiente fertilizantes, fitosanitarios o agua, reduciendo significativamente el uso de insumos y su impacto ambiental.
Para los viñedos, esta tecnología es especialmente valiosa. La calidad de la uva y, por ende, del vino, depende de un seguimiento exhaustivo del viñedo. Los drones permiten monitorizar la salud de cada cepa, evaluar el vigor de la vegetación y estimar el momento óptimo de la vendimia. Además, en terrenos de difícil acceso o con pendientes pronunciadas, los drones facilitan labores como la fumigación, minimizando los riesgos para los operarios y asegurando una cobertura uniforme.